En los principios de la historia, los primeros pobladores fueron nómades, sin conocimiento ni razón alguna sobre que podía existir en el horizonte; toda tierra era nueva y a la vez una; existía el presente y un vacío. Luego, con el correr del tiempo y la asimilación del espacio el ser humano fue afincándose y pasando de la condición nómade a la sedentaria: grandes imperios se establecían y su campo presente se expandía: aunque reducido a su propio Imperio y anexos, la asimilación del espacio se había extendido: de allí se pasó a Reinos, y luego a Monarquías. Siempre en constante extensión, el espacio absorbió América y el mundo se fue haciendo uno.
Y así el mundo se fue agrandando.
Y así el mundo se fue agrandando.
Una vez marcados con hilos sus límites, estos hilos tuvieron corriente y se transformaron en conductores de electricidad, y así nació la tecnología de la comunicación. Ya conectado, los espacios fueron conociéndose más profundamente. Se amigaron los hilos y se entrelazaron hasta formar uno, que abarcara todo el Mundo.
Y así el mundo se fue achicando.
El cielo fue tapado por Cables y ahora, con el cielo negro, tiran unos contra otros y van viniendo, cada vez más terrible lo cerca, cada vez más rápido y tensionados.
Y así el mundo se fue achicando.
El cielo fue tapado por Cables y ahora, con el cielo negro, tiran unos contra otros y van viniendo, cada vez más terrible lo cerca, cada vez más rápido y tensionados.
Y así el mundo se va atrofiando.
1 comentarios:
Yo creo que mientras exista gente que piense como tú habrá una posibilidad de que el mundo deje de atrofiarse.
Pásate por mi blog si tienes un rato.
http://morethanwords1524.blogspot.com/
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